Reviews de Shows: CHILDREN OF BODOM en Teatro Las Duranas

CHILDREN OF BODOM en Teatro Las Duranas

Bandas Invitadas: KRISIS – SENTENCIA

Martes 6 de Diciembre de 2011

por Jorge Patacas

Con mucha expectativa se vivía la llegada de los finlandeses Children Of Bodom por primera vez a Montevideo, desde el anuncio de la fecha unas cuantas semanas antes.
Las malas condiciones climáticas del día anterior dejaban una incógnita de lo que podía ocurrir en ese aspecto, ya que la fecha se realizaría al aire libre. Más allá de que horas antes del comienzo del evento, el clima se mostraba amenazante, las lluvias no se hicieron presentes en ningún momento, por lo que ese factor no afectó en absoluto.

Ya en la tardecita, mientras Krisis, la primera de las bandas nacionales, se adueñaba del escenario, me encontraba realizando una nota con Henkka T. Blacksmith, bajista de los finlandeses, por lo que me fue imposible presenciar su show. Para cuando llegué al Teatro Las Duranas, Sentencia estaba a punto de comenzar su presentación, mientras apenas la mitad de las gradas del lugar estaban cubiertas. La banda de metalcore se despachó con un setlist enfocado en presentar su flamante disco debut «Relentless Awakening Of The Restless Ones», comenzando con dos de sus composiciones más gancheras: «So Many Times» e «It’s A Farewell». Como a menudo sucede, estos primeros temas no contaron con el sonido esperado, pero enseguida los desperfectos se solucionaron, y durante el resto de su tiempo en escena se pudo percibir de mejor manera la energía y la entrega del quinteto sobre el escenario, con un Oscar Illada que mostró una evolución en lo que tiene que ver con las voces limpias, Alvaro Gilleron a puro machaque detrás de su batería, y los demás músicos moviéndose de un lado a otro. «En Tus Ojos», «Live Through Me (JSE)», «Invierno», el a esta altura clásico «The Omen», y una extraña y sorpresiva versión metalcore de «Paranoid» de Sabbath, completaron su repertorio.

Unos cuantos minutos hubo que esperar para que finalmente se apagaran las luces, y los cinco integrantes de COB comenzaran a salir al escenario, incluyendo al tecladista Janne Warman con una cámara en mano filmando y sacando fotos a la audiencia.
Con «Shovel Knockout» de su última producción «Relentless Reckless Forever» (2011) dieron el puntapié inicial, y ya desde el primer momento, se percibía que algo no andaba bien. En primer lugar, el sonido estaba claramente por debajo de las expectativas, mejorando algo más adelante, y por el otro lado, el rostro del vocalista, guitarrista y líder de la banda, Alexi Laiho, se veía cansado y desganado. Algo definitivamente sucedía, y al cabo de «Are You Dead Yet?», el propio Laiho se dirigiría a la multitud por primera vez en la noche, disculpándose por el hecho de encontrarse enfermo y agradeciendo a todos por haber ido.

El show siguió adelante normalmente, con la particularidad de que Laiho se mostraba muy quieto, no cantaba los temas enteros y desaparecía en determinados momentos o al término de los mismos, debido a su mal estado de salud. A los cuarenta y cinco minutos de haber empezado la presentación, el quinteto se retiraría del escenario por primera vez para regresar minutos después y hacer los bises. Tras estos, las luces se encendieron, los finlandeses hicieron un saludo general, y rápidamente se retiraron del escenario, ante un público que aplaudía, pero al mismo tiempo se mostraba confundido a tal punto, que la mayoría permaneció en el lugar hasta veinte minutos después, cuando los técnicos ya estaban desarmando todo.
Al darse cuenta finalmente que la banda no iba a volver a pisar el escenario, comenzaron a sentirse abucheos, quejas y disconformidad en general, a pesar de que la corta presentación tuvo algunos puntos altos como «Hate Me!» e «In Your Face». Quizás la banda podría haberse disculpado nuevamente antes de bajar del escenario, o arreglárselas para que no haya sido un final abrupto y dejar tan desconforme al público, pero en definitiva, lamentablemente a Laiho le tocó enfermarse justo en Uruguay, y se perdió la oportunidad de presenciar un show con un Children Of Bodom rindiendo al 100 % como se acostumbra a ver. Esperemos que exista otra oportunidad!

 

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